El
canto del pájaro - Anthony de Mello
Se
hallaba un elefante bañándose tranquilamente en un remanso, en mitad de
la jungla, cuando, de pronto, se presentó una rata y se puso a insistir en que el elefante saliera del agua.
la jungla, cuando, de pronto, se presentó una rata y se puso a insistir en que el elefante saliera del agua.
—«No
quiero», decía el elefante. «Estoy disfrutando y me niego a ser molestado».
—«Insisto
en que salgas ahora mismo», —le dijo la rata.
—«¿Por
qué?», —preguntó el elefante.
—«No
te lo diré hasta que hayas salido de ahí», —le respondió la rata.
—«Entonces
no pienso salir», —dijo el elefante.
Pero,
al final, se dio por vencido. Salió pesadamente del agua, se quedó frente a la
rata y dijo:
—«Está
bien; ¿para qué querías que saliera del agua?».
—«Para
comprobar si te habías puesto mi bañador», —le respondió la rata.
El
aprender no ocupa lugar: Es infinitamente más fácil para un elefante ponerse el
bañador de una rata que para Dios acomodarse a nuestras doctas ideas acerca de
Él.
No hay comentarios:
Publicar un comentario