Un
granjero del partido de Bolivar, de la provincia argentina de Buenos Aires,
paseaba su ganado cuando encontró un gran caparazón. Los arqueólogos que se
desplazaron para examinar el hallazgo han revelado que se trata de cuatro
gliptodontes gigantes, mamíferos emparentados con los armadillos, que tendrían
20.000 años de antigüedad.
Se
calcula que cada ejemplar pesaba más de una tonelada, y medía más de 3 metros
de largo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario