Ramón
Arangüena, autor del libro: Typical Spanish
Hace
años, en un bar de Valladolid, un padre estaba jugando junto a su hijo con una
máquina tragaperras. Tras perder un montón de dinero, el padre decidió dejar de
echar monedas porque no era su día de suerte. Su hijo, de unos siete años, le
pidió entonces cinco duros más para hacer un último intento. Al principio el
padre le dijo a gritos que no, pero luego acabó cediendo, quizá con la
esperanza de que una mano inocente tuviera más suerte. Todos en el bar
permanecíamos expectantes, sin querer desviar la mirada. El chaval metió la
moneda y, por supuesto, tampoco hubo premio. El progenitor, enfadado por su
suerte, se ensañó con el pequeño y a gritos le espetó:
—Ya
te había dijido que no la meterías.
Todos
volvimos la cara sin disimulo hacia el padre que, en su defensa verbal, se
atrevió a añadir:
—O
como se diría ó diriese.
Es
tan fácil disfrutar de situaciones parecidas como ser nosotros los protagonistas
de las mismas. Aún recuerdo mi careto facia frente al diccionario tras haber
defendido a muerte cosas tan erróneas y tan simples como que "husos
horarios" es sin hache.
Hay
gente que cuando escucha algo así lo apunta en una lista. Es el caso de Montse
Abbad. Le fascina cxoger cosas al vuelo. Aquí reproduzco algunas frases
memorables tan verídicas como la vida misma:
Por
favor, endereza tú la ensalada.
Vino
la guardia civl y levantó apestado del accidente.
Fue
una operación a vida o muerte para instalarlle un paipal. (baypass).
Es
una persona fabulosa, es un desecho de virtudes.
Rapidito
que es gerundio.
Toma
tanta drogaina que ha de morir de una doble dosis.
En
ester barrio hay mucha prostiputa.^Para ver lo que tenía me hicieron una
redundancia magnética.
Aunque
fue un accidente muy grave no le quedaron espuelas.
¡Qué
calor! ¡Qué soborno!
Un
equipo de música con doble pretina.
Eso
no es para rascarse las vestiduras.
Esta
noche hace frío, tendré que ponerme el enredón en la cama.
Me
quedé fumigado del susto.
Yo,
sin en cambio, prefiero eso.
No
lo sé ni falta que me importa.
Lllovía
muchísimo, paecía el Danuvio universal.
Atracaron
el banco con una escopeta recortable.
En
el accidente murieron tres personas y un portugués.
No
tiene hijos porque ella es esméril.
Vivo
en un chalet acosado.
Lo
detuvieron en la calle, le pidieron la documentación y lo cachondearon.
Para
sacarle el niño tuvieron que hacerla la necesaria.
Le
tocó la lotería y ahora vive como un majara.
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