La
cebolla y el árbol de Navidad (09.0.2020)
Una
familia feliz está en la mesa para cenar, cuándo el hijo dice si puede hacer
una pregunta.
El
Padre responde:
—¡Claro,
hijo, pregunta!
Y
el hijo dice:
—¿Papá,
cuántos tipos de TETAS existen?
El
padre, algo sorprendido, responde:
—Bien,
mi hijo, existen tres tipos.
A
los 20 años la mujer tiene pechos como manzanas, firmes y redondos, lindos, da
placer verlos.
De
los 30 a los 40 son como peras, todavía bellos, aunque un poco caídos...
A
los 50 son como cebollas...
El
hijo dice:
—¡Cebollas!
El
padre respondió:
—Si.
Cuando los miras, te dan ganas de llorar.
Esta
explicación lleva a madre e hija a un punto neurálgico tal, que la hija
pregunta:
Puedo
también hacer una pregunta un tanto personal —¿Mamá, cuántos tipos de penes
existen?
La
madre queda un poco sorprendida, pero mirando al marido responde:
—Bien,
hijita, un hombre pasa por tres fases distintas…
A
los 20 años el pene es como un tronco de Jacarandá, respetable y firme.
De
los 30 a los 40 años el pene es como un tronco de Sauce llorón flexible pero
confiable. Después de los 50 años el pene queda como un árbol de Navidad.
La
hija dijo:
—¡Árbol
de Navidad!
La
madre responde:
—Eso
mismo.
Muerto
de la raíz a la punta, y las bolas cuelgan como decoración
Y
lo peor: Sólo se arma una vez al año.
No hay comentarios:
Publicar un comentario