Perdona
que sea sordo y ciego ante… (09.03.2020)
Perdona
que sea sordo ante tus palabras, también ciego antes tus escritos.
Pero
llevo mucho tiempo sin oír tu voz, del mismo modo que llevo, aún más tiempo,
sin leer tu admirable escritura.
Fui
al médico con estos problemas, después de un chequeo por parte del facultativo,
me preguntó:
—Mira
si eso se debe al no pronunciamiento de palabras y a la inercia en la escritura
por parte de tu amiga.
Siguiendo
los consejos del galeno, hoy te remito este escrito, con la siguiente pregunta:
—¿Te
pasa algo?
Muy
buenos días tenga usted.
bayekas
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